Hasta el siglo XVIII las obras teatrales solían estar formadas por 5 actos, pero en la actualidad es frecuente ver obras teatrales de 1, 2 y 3 actos.

Las obras de teatro se suelen estructurar en actos y escenas. Por un lado, los actos son las partes en que se divide la obra y suelen presentar importantes cambios de escenario, personajes y paso del tiempo en la narración. Y, por otro lado, las escenas son las porciones en que se dividen los actos y que representan situaciones o acciones de los personajes en el escenario. Hasta el siglo XVIII una buena parte de las obras teatrales estaban compuestas por 5 actos, pero en la actualidad, es frecuente ver obras teatrales de 1 acto, 2 actos y 3 actos, que han llegado a ser cada vez más populares.
¿Y cómo se señala en el teatro el final de un acto?
Si vas a ver una obra de teatro y tienes curiosidades por saber cuándo ha llegado el final de un acto, tan solo deberás fijarte en que la escena pasa a «oscuro» (es decir, un momento en que se apagan todas las luces del escenario) o tiene lugar una pausa iniciada con la caída del telón o por un intermedio (también conocido como «interludio»).
El conjunto de sus actos hacen que una obra pueda durar entre 1 y 3 horas habitualmente, aunque podemos encontrar óperas con una duración de 4 horas.
Referencias:
- Acto. Enciclopedia cubana. EcuRed [Artículo en línea]. Recuperado de: https://www.ecured.cu/Acto
- Portillo, R. y Casado, J. Diccionario de terminología teatral, Fundamentos, 1986.